Jueves 29/8, 12.30 hs. – Presentación ¿Qué memoria y justicia? Teorización crítica e intervenciones reparadoras

Hola todas y todos,

En el marco de las XIII Jornadas de Sociología de la UBA presentaremos nuestro nuevo libro colectivo ¿Qué memoria y justicia? Teorización crítica e intervenciones reparadoras. Junto a los autores los esperamos para discutir el libro el jueves 29 a las 12.30 hs. en el aula 105 HU (sector Humberto Primo) de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.

Les dejamos, a modo de tentempié, unas palabras que fueron pronunciadas en la presentación que se hizo del libro en la librería Caburé el día 15 de agosto.

¡Los esperamos!

Presentación ¿Qué memoria y justicia? Teorización crítica e intervenciones reparadoras

Jueves 15 de agosto de 2019

Librería Caburé

Buenas noches a todas y todos, muchas gracias por estar aquí junto a nosotros para la presentación de este libro colectivo que hemos amasado con mucho cariño hace algún tiempo ya y que hoy por fin sale de su crisálida de archivo Word para pasar a una materialidad mucho más asible y amigable, adoptando la vieja fisonomía del libro. Ojalá que con esta metamorfosis los ensayos aquí reunidos puedan darse a la lectura de nuevos ojos. Me toca hoy a mi tomar la palabra en esta ceremonia de estreno, y lo primero que creo necesario es agradecer la presencia de todos y cada uno de ustedes por compartir nuestra alegría en esta ocasión de estreno junto a muchos de los autores. El libro que nos convoca tiene por nombre uno un tanto largo, algo que creo que no podemos evitar. Se trata de ¿Qué memoria y justicia? Teorización crítica e intervenciones reparadoras. Aquí se reúnen una serie de ensayos de muchos autores que trabajamos hace ya algunos años junto con Claudio Martyniuk. Junto a él cada uno de nosotros viene investigando diversos temas de su interés como integrantes de los distintos proyectos UBACyT que venimos desarrollando a través de los años, proyectos cuyo núcleo común, creo, es la teoría crítica. Y decir esto supone, en parte, la imposibilidad de decidir cuál sería una teoría tal, dado que la posición crítica es esencialmente inesencial, mostrándose porosa ante los reclamos de las distintas coyunturas y violencias que suscitan sus preguntas.

En este sentido, el lector que tome entre sus manos el libro que hoy nos convoca podría fácilmente hacer una comprobación saeriana al mirar los títulos de los textos allí condensados: al decir de la novela Cicatrices, exclamaría, no sin razón: “Los pedazos no se juntan”. Efectivamente. Es que el libro no intenta cerrar las heridas del mundo con una unidad sólo textual. Intenta, una y otra vez, con distintos tonos y estrategias, hacerse cargo de la fragilidad de la existencia, para cuidarla. Y fracasa, porque el mundo dispuesto bajo la única insignia del valor de cambio lo hace una tarea ardua, interminable, a la cual cada uno de estos ensayos se aboca a su modo, arriesgando distintos estilos y adentrándose en temáticas disímiles.

El núcleo normativo mínimo de lo que aquí se ensaya como teorización crítica puede decirse de modo suscinto: ante el sufrimiento ajeno e innecesario, sólo una disposición: debe cesar. Muy tempranamente en su producción, ya Marx lo sugería cuando señaló como nuevo imperativo categórico el “echar por tierra todas las relaciones en que el ser humano es un ser humillado, sojuzgado, abandonado y despreciable”[1]. Para ser fiel a este llamado desde un pensamiento que, ya desde el comienzo, encuentra su origen en algo que lo rebasa, lo saca de su letargo de biblioteca, de discusión sólo con la plana y sutil silueta de la letra impresa, no hay un lenguaje unívoco. Este libro explora distintos fraseos y estrategias para intentar dar con la complejidad de aquellos diversos temas que suscitan su escritura, su inquietud. A veces se trata, sí, de ensañarse con los lenguajes heredados de las ciencias sociales, las teorías jurídicas o la filosofía, para proceder a su crítica, para sacarlos de su autocomplacencia, de su imposibilidad de hacerse cargo de las deudas que implican las violencias onmipresentes: aquellas del sistema de sexo / género, las que mantiene y conserva el derecho, las de las prácticas discursivas de saberes que lasceran los cuerpos para hacerlos entrar en sus moldes clasificatorios.

No es mi intención comentar cada uno de los ensayos que componen el libro, tampoco creo que sería justo para ellos y sus autores privar a los lectores de un encuentro sin balizas interpretativas previas, sin embargo, sí puedo adelantar, a modo de convite, algunos de los núcleos problemáticos que son desplegados en el libro. Parte de ellos, creo, reflejan muchas de las inquietudes insomnes que se cristalizan en torno a la figura de Claudio, de su escritura y su enseñanza. Estos ensayos versan, entonces, sobre las áridas comarcas del derecho, con su insensibilidad sostenida hacia las vidas que no entran en sus moldes, también sobre las relaciones entre el conocimiento y la estética, sobre los modos de la crítica de los lenguajes heredados para pensar las prácticas de conocimiento, e incluso sobre las humillaciones sistemáticas esgrimidas contra los cuerpos que se sublevan ante las violencias normativas; también se aborda el problema del Estado, su rostro de Jano, bifronte, donde éste puede ser cobijo y motor de políticas públicas que se hacen cargo de las violencias del pasado que persisten en el presente o, por el contrario, agente activo de vulneraciones sobre las poblaciones enmarcadas en sus dominios, impidiendo el ejercicio de una real soberanía, haciendo reinar el estado de excepción como regla, bajo las apacibles formas del estado de derecho, hueco e insustancial. Las emociones como la empatía o la nostalgia tampoco escapan de las teorizaciones críticas aquí ensayadas. Es una ecléctica enumeración la que acabo de hacer, es verdad, pero quizá es también un atisbo de este libro compuesto de estilos distintos, ritmos desacompasados que comparten, empero, una unánime búsqueda de caminos, atajos en medio de la adversidad para llegar sino a un solaz, a una justicia por venir, justicia que este libro busca invocar. Acaso, citando a una de las autoras, tan sólo agitar el indeclinable deseo de vivir una vida vivible sea la cifra que recorre la heterogeneidad de pulsos que espero pronto sean acogidos por los aquí presentes. Muchas gracias.

Oriana Seccia


[1] Karl Marx, Introducción a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel.

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